Es una ruta lineal, corta y fácil, de unos 2 km. de ida. Para acceder a ella hay que entrar por una pista de una pizarrera en buen estado y ancha, pudiendo llegar fácilmente en coche hasta el final de la misma, donde empieza el tramo señalizado de la ruta.
La pista nos lleva a un ancho sendero que en fácil ascenso nos lleva primero a una laguna y posteriormente al espectacular circo glaciar donde se encuentra el Lago de La Baña. En las laderas, tupidas de vegetación, se encuentran algunas de las fuentes del Río Cabrera.
En su tramo final, la senda bordea el lago proporcionando excelentes panorámicas, hasta que describiendo un pequeño giro se accede a sus orillas, justo en el enclave en el que muere el torrente que lo alimenta, con sus aguas frías y transparentes .