Se trata de una ruta por el Macizo Oriental, que desde el Puerto del Pico nos lleva hasta el pico del Torozo, rodeándole hasta alcanzar su cima por su cara Este. La pared sur, debido a su verticalidad, es preferida por los escaladores. 

Desde la cumbre divisaremos el “Barranco de las Cinco Villas” como las águilas reales y los buitres que nidifican en sus cercanías. Como estas rapaces que utilizan las térmicas (corrientes de aire caliente) para ascender y ahorrar energía en sus vuelos, los aficionados al parapente utilizaban esta cumbre y las colindantes para emularlas, aunque sólo los expertos cuentan con la pericia necesaria para sobrevolar estos parajes.

El camino de ascenso transcurre casi en su totalidad entre piornos, colindantes a nuestra izquierda con pinares de pino silvestre. Hacia el Sur, llaman nuestra atención los ancestrales bancales que caracterizan el paisaje del sur de Gredos, levantados para sus cultivos mediterráneos de olivos, vides, higueras y castaños. Junto a estos, el pino resinero y laricio, configuran un bello mosaico de color en las diferentes estaciones del año.