Partiendo desde el Alto Concha, este sendero nos adentra en el Valle de Sotoscueva y nos permite acercarnos a poblaciones como Cueva, Quisicedo, Villabáscones, Quintanilla y Vallejo. El camino discurre por un atractivo paisaje, entre bosques de robles y encinas, verdes y extensos pastizales y pueblos que han sabido conservar su característica arquitectura montañesa.
TUMBAS ANTROPOMORFAS: a escasos metros del sendero principal, entre Villabáscones y Quintanilla de Sotoscueva, aparecen entre la espesura del bosque un conjunto de 20 tumbas antropomorfas altomedievales. Están excavadas en la roca y tienen diferentes tamaños.
ARQUITECTURA POPULAR: en las poblaciones del recorrido encontramos buenos ejemplos de arquitectura popular que hereda los principales rasgos de la casa montañesa. En torno a estas construcciones aparecen edificios destinados a labores ganaderas.
QUISICEDO: ubicada en el centro de este bello conjunto urbano, la torre de los Velasco muestra su claro carácter defensivo y nos traslada al medievo. En torno a ella y junto a las excelentes casas tradicionales, aparecen otras esbeltas construcciones con sólidas fachadas de sillar y aires señoriales. La iglesia de Santiago aún conserva elementos que confirman su indudable origen románico.
SUMIDERO DEL GUAREÑA: al regreso de nuestra ruta podremos descender hasta el sumidero del Guareña. Los arroyos y torrentes procedentes de la cercana Cordillera Cantábrica han sido los modeladores de este extenso complejo kárstico. Mucha precaución si optamos por acercarnos al lugar.
ERMITA DE SAN TIRSO Y SAN BERNABÉ: a escasos metros del punto de salida nos encontramos con la espectacular Ermita de San Bernabé, el lugar más emblemático del Monumento Natural Ojo Guareña.
Los muros de su interior muestran un interesante conjunto de pinturas de estilo popular que cuentan los milagros y martirios de San Tirso y San Bernabé.